martes, 7 de septiembre de 2010

Ultimo rugido de sol



Aún chorrean del cielo mansas gotas de luz.

El crepúsculo se empecina en mantenerse en píe,

mas el silencio de la noche camina aprisa.

Lento fallece el día con su carga diaria de ineludibles adioses

y desencuentros, de espesas rutinas, de miradas extraviadas

en humo y esperanzas torcidas.

De los risueños árboles tierno aliento nace.

El viento juega y coquetea con las verdes mariposas

en blandas ramas que sacuden frío.

Una nube caprichosa busca al sol, lo descubre,

el cielo irisado suelta un suspiro de luz y color;

fulgurante música dorada

como último rugido del eterno tigre

antes de dormir.

Demoradas aves agitan su alma

y de ella surge música y calma,

regresan a sus nidos,

la tarde ha caído sin remedio,

                                                otra vez.

viernes, 3 de septiembre de 2010

LARGOS CHARCOS DE LUNA


Por entre las bruñidas nubes, furtivo se desliza tu rostro plateado.
Como escapando de mi silencio errante. Como haciéndose notar sin duelo,
como lanzándole un guiño al olvido, mirada felina, bajo la sombra.

Lirio aliento en gélida altura, noctámbula flor de luz,
fulgor untado en tiernos arbustos, en sosegados árboles, e
n infiernos laberintos, en pliegos de carne, sospecha y sangre.

En esta hueca noche de soledad que asfixia y delirio asfalto,
duros ecos de usted me invaden y llenan todo el silencio mío,
prudentes mariposas de sueño vago.

Un frió escozor vence mis parpados y un callado suspiro brinca al aire,
 de usted el recuerdo hila viejas promesas enfangadas
y agonizantes charcos del ayer saltan en mi compasiva alma.

Me voy desenredando con palabras chiquitasmientras la luna de a poquito desfallece,
sólo me deja, aquí recostado sobre sus sabanas blancas,
fumándome las últimas horas del día. Fumándome la ultima nostalgia de su sonrisa.

Te pienso a obscuras y en mi afán encuentro en tú mirada rojas lagunas
y silencios largos, muy largos, silencios congelados,
te pienso a obscuras mariposa que de mis ramas ha volado.

Bosque de Chapultepec

(Bosque de chapultepec 08 del 2010)

jueves, 2 de septiembre de 2010

SANQUITA MUNDO


Un día nos despertaremos

Para mirarlo a los ojos

Ver que desde sus adentros

Brota ternura alborozo.



Un día nos despertaremos

Para estrecharle la mano

Sentir que aún su corazón

Late con fuerza en rebaños.



Un día abriremos los ojos

Para escucharlo atentos

Ver que nuestra sinrazón

Lo ha dejado sin aliento.



Un día andará muy maltrecho

De su corazón aterrado

Por cuanto mal que hemos hecho

Por tanto mal cosechado.



Un día no nos perderemos

Entre infiernos materiales

Y sobre aquellos matorrales

El amor encontraremos.



Un día este humano tan cruel

Que te ha tragado y quebrado

Podrá sentir tu dolor

Mundo adorado, mi bien amado.



Un día nos levantaremos

Para mirarlo a los ojos

Y en un remanso hallaremos

La humanidad sin cerrojos.